Madrid vs. Barcelona

El otro día, cenando en el Citra, charlaba con mi primo y mi abuela sobre Madrid y Barcelona. Barcelona ya tiene un nombre que Madrid aún no tiene en el mundo contemporáneo. Barcelona tuvo las Olimpiadas de 1992, tuvo un gran auge a finales de los 80 y principios de los 90, pero parece que se ha relajado en los últimos años. Y eso es lo que yo les comentaba a mi primo y mi abuela: así como los 90 fueron de Barcelona, me parece que el principio de este siglo es y va a ser de Madrid. Quizás sea cuestión en cierta medida de lo que dice mi primo de que Barcelona ya no puede crecer, pero crecer no se crece solo a lo grande, sino a mejor. Es verdad que gran parte de los proyectos que está llevando a cabo Madrid tienen que ver con lo mucho que aún se puede hacer en Madrid: las 4 torres de la antigua ciudad deportiva (CTBA), la ampliación del metro o el nuevo Barajas. Pero hay otras cosas como las iniciativas culturales (La Noche en Blanco o La Noche de los Teatros) o la creación de una extensa educación bilingüe pública que no se ha desarrollado en Barcelona.

Quede dicho que Barcelona me parece una ciudad espectacular, y que comparto la opinión de mi primo de que Barcelona es un sitio como Roma o Nueva York que merece la pena visitarlo una vez en la vida, pero creo esta es la década de Madrid.